La Magia de las Palabras
Por Enrique Arteaga Sustaita
Cuando escuché esta canción por primera vez, algo sentí … es la magia que tienen los poetas, de remover nuestros sentimientos con sus palabras… noten que no son palabras elegantes ni rebuscadas, son palabras comunes y corrientes pero que ordenadas de determinada manera, logran transmitirnos un mensaje que nos mueve a sentir algo. Todo escrito tiene dos características: el fondo y la forma, en donde el fondo es el tema del que trata el escrito, y la forma es la manera en que está escrito… Pero aquí viene la magia de Manzanero… en esta canción encuentro, además del fondo y la forma, un trasfondo y… es lo que me atrapó. Alguien dirá: ¿Qué tiene de poético “Esta tarde vi llover, vi gente correr y no estabas tú”?… Pues, precisamente, el trasfondo: En cada verso, en cada estrofa, Manzanero logra conmovernos de su inmensa nostalgia, tristeza y melancolía ante la ausencia del ser amado, es el inmenso dolor de no poder compartir con el ser amado ausente las bellezas de la vida, a los ojos de un poeta enamorado, pero… sin mencionarlo… ¿ya ven la magia?. Cada estrofa es como un cuadro pictórico de un gran artista que con tan solo verlo, ya nos está brotando el sentimiento. No contento con eso, Manzanero viste su canción con un matiz de notas que le viene ad hoc al tema… Ya no sabes tú qué te mueve a la tristeza y a la melancolía, si la letra, la música o las dos cosas. Gracias, Maestro… siempre tendrá de mí mi admiración y mi respeto… y mi gusto por su obra… ¡Descanse en paz! – Enrique Arteaga Sustaita. 28 de Dic. De 2020.
Esta tarde vi llover
Armando Manzanero
Esta tarde vi llover,
Vi gente correr
Y no estabas tú.
La otra noche vi brillar
Un lucero azul
Y no estabas tú.
La otra tarde vi
Que un ave, enamorada,
Daba besos a su amor, ilusionada,
Y no estabas.
Esta tarde vi llover,
Vi gente correr
Y no estabas tú.
El otoño vi llegar,
Al mar oí cantar
Y no estabas tú.
Yo no se cuánto me quieres,
Si me extrañas o me engañas,
Solo se que vi llover,
Vi gente correr…
Y no estabas tú.
